martes, 2 de diciembre de 2014

Invest in #Marketing - "No you can sell a person who is not listening."

http://hachestudio.com/blog/invertir-en-marketing-no-se-le-puede-vender-a-una-persona-que-no-este-escuchando/
traducido por Federico Dilla

Invest in Marketing - "No you can sell a person who is not listening."

marketing hache
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In the s. XXI time is money. We function as automata at a frantic pace. Immersed in our I pass 24 hours of our day. The variety of products it offers is alarming. Apart from the competition is key. Getting impact our target is to make a difference. Advertising is what makes the difference. Which turns your product into a valuable asset. Which ensures that we can not live without this or that.

Advertising has been the cause of converting a yogurt in a danone, giving the brand a worldwide recognition. The cause of that current generations hum songs Coca-Cola 70s or we buy in Adidas if we are the Nike Real Madrid or Barca if we are.

  A product, a product that is not is not known, there ...

therefore see advertising as an expense is an error. Advertising is an investment. As they say the words of Henry Ford knew, "who stop investing in advertising to save money is like if I stopped the clock to save time." The key is not to stop investing in advertising but sharpen our creativity, strategy and planning to choose the most cost effective solutions.

The goal of any business is to sell, get to be in the public mind. Advertising is in charge of it; to capture the attention of the public, remain in the minds of consumers and encourage the purchase. That is why advertising is an investment for the company because it is getting the products are sold.

Advertising is in charge of making a product in a sense, in a sense, to a value. Get a common good becomes an elitism. That chocolate is a pleasure or a luxury car. Is advertising that makes the audience to identify with a product and it is precisely this identification which gets the sale.

Saying that annoying advertising, which is unnecessary, is a topical; like saying that brunettes are smarter than blondes. Bad ads are what bother, good never forget. Remain wedded to the consumer's mind, even transmitted generation after generation.

There are many companies that reduce advertising spending in times of crisis by considering an expense. Commit an error. Numerous experts say that in times of crisis the best antidote is to invest in advertising. It is precisely in times of crisis when advertising gives you the opportunity to differentiate yourself and stand out from the crowd. In fact many studies show that companies that invested in advertising during the crash of 1981 increased sales by 256%.

Why is the best time to invest in advertising? The general fall in advertising rates justifies and makes it more attractive advertising just when many companies are implementing cuts in advertising spending. This removal of the advertising market is causing many companies that consumers are less exposed to constant bombardment to which they are subjected and that companies that retain their advertising investment, capture the attention of consumers and thus increase your sales. Companies that ignore the advertising dollar disappear from the minds of consumers leaving space for the benefit of competition.

The key is to study the advertising strategy and provide consumers with messages tailored to the times of crisis, encouraging them to think that this product is the one that best meets your needs at times. From Hache we help you choose the best policy option involving the most profitable investment for maximum results. Because we are aware that every customer, every market, every product needs a strategy to measure. In Hache we have a highly qualified team. The extensive experience of our group in the field of marketing and communication of large multinationals and media, abalan our work.



Invertir en Marketing – “No se le puede vender a una persona que no esté escuchando.”

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En el s. XXI el tiempo es oro. Funcionamos como autómatas a un ritmo frenético. Sumergidos en nuestro yo transcurren las 24 horas de nuestro día a día. La variedad de productos que se nos ofrece es alarmante. Diferenciarse de la competencia es la clave. Conseguir impactar en nuestro target es marcar la diferencia. La publicidad es la que marca la diferencia. La que convierte tu producto en un bien preciado. La que consigue que no podamos vivir sin esto o aquello.
Ha sido la publicidad la causante de convertir un yogur en un danone, dándole a la marca un reconocimiento mundial. La causante de que las generaciones actuales tarareen canciones de Coca-Cola de los años 70 o de que compremos en Adidas si somos del Real Madrid o en Nike si somos del Barça.
 Un producto que no se conoce, un producto que no se ve, no existe…
por esta razón contemplar la publicidad como un gasto es un error. La publicidad es una inversión. Como dicen las sabías palabras de Henry Ford, «quien deja de invertir en publicidad para ahorrar dinero, es como si parara el reloj para ahorrar el tiempo». La clave no es dejar de invertir en publicidad sino en afinar nuestra creatividad, estrategia y planificación para poder optar por las soluciones más rentables y efectivas.
El objetivo de cualquier empresa es vender, conseguir estar en la mente del público. La publicidad es quien se encarga de ello; de captar la atención del público, permanecer en la mente del consumidor e incitar a la compra. Es por ello que la publicidad supone una inversión para la empresa porque es la que consigue que los productos se vendan.
La publicidad es la encargada de convertir un producto en una sensación, en un sentimiento, en un valor. Consigue que un bien común se convierta en un elitismo. Que el chocolate sea un placer o que un coche sea un lujo. Es la publicidad la que consigue que el público se identifique con un producto y es, precisamente, esta identificación la que consigue la venta.
Decir que la publicidad molesta, que es innecesaria, es un tópico; como afirmar que las morenas son más listas que las rubias. Los malos anuncios son los que molestan, los buenos nunca se olvidan. Permanecen aferrados a la mente del consumidor, incluso se transmiten generación tras generación.
Son muchas las empresas que reducen la inversión en publicidad en épocas de crisis por considerarla un gasto. Cometen un error. Son numerosos los expertos que aseguran que en tiempos de crisis el mejor antídoto es invertir en publicidad. Es, precisamente, en tiempos de crisis cuando la publicidad te ofrece la oportunidad de diferenciarte y destacar de entre la multitud. De hecho numerosos estudios demuestran que las empresas que invirtieron en publicidad durante el desplome de 1981 aumentaron sus ventas en 256%.
¿Por qué es el mejor momento para invertir en publicidad? La caída generalizada de las tarifas publicitarias justifica y hace más atractiva la publicidad justo en el momento en que muchas empresas están aplicando recortes en la inversión publicitaria. Esta retirada del mercado publicitario de muchas empresas es la causante de que los consumidores estén menos expuestos al bombardeo constante al que están sometidos y que, las empresas que siguen manteniendo su inversión publicitaria, capten la atención de los consumidores y aumenten así sus ventas. Las empresas que dejan de lado la inversión en publicidad desaparecen de la mente de los consumidores dejando espacio para el provecho de la competencia.
La clave está en estudiar la estrategia publicitaria y ofrecer a los consumidores mensajes adaptados a los tiempos de crisis que les inciten a pensar que ese producto es el que mejor satisface sus necesidades en los tiempos que corren. Desde Hache te ayudamos a elegir la mejor opción estratégica que suponga la inversión más rentable para obtener los máximos resultados. Por que somos conscientes de que cada cliente, cada mercado, cada producto necesita una estrategia a medida. En Hache contamos con un equipo humano altamente cualificado. La amplia experiencia de nuestro grupo en el sector del marketing y en la comunicación de grandes empresas, multinacionales y medios de comunicación, abalan nuestro trabajo.